Navidad. Tiempo en el que sueles pasar con la família mas de lo que deberias.
La noche de navidad, que mientras ayudas a hacer canapés y a preparar las gambas. Oyes gritos en el salón y alguien que se va corriendo, cierra la puerta del lababo y se pone a llorar.Se te cae un canapé. Tranquiila, lo vuelves a montar y lo pones en la bandeja.
Se oyen unos villancicos para ahogar los gritos.
Todos sentados en la mesa, silencios incómodos. Alargas la mano para coger un trozo de jamón y con la manga de la camisa haces que la copa de vueltas, pero por suerte, tu otra manos es más rápida y evitas que de derrame todo el líquido.
Y de repente, se oye a tu hermano de seis años -que bueno está esto-, tu madre sonrie, tu abuela le da la razón, tu padre se pone a hablar con su cuñado y risas, risas y más risas. La velada continua tranquila.
Se apagan los villancicos.
Te pones el pijama, te metes en la cama, te tapas con el edredón hasta el cuello y cierras los ojos.